jueves, 23 de agosto de 2007

CARTA ABIERTA AL MOVIMIENTO JUVENIL DOMINICANO-CHILE

CARTA ABIERTA AL MOVIMIENTO JUVENIL DOMINICANO.

Querid@s Jóvenes del M.J.D:

La Mesa Directiva de la FADO reunid@s en sesión de trabajo, hemos leído atentamente la carta abierta que ustedes nos hicieron llegar.

Comprendemos perfectamente el momento que ustedes están viviendo y que lo señalan de una manera muy directa: “ ... actualmente nos encontramos inmersos en una crisis traducida en la búsqueda por mantener vivo este carisma y compromiso...”. Tod@s sabemos que las crisis, en cualquier etapa de la vida, se constituyen en un proceso de crecimiento y ustedes hoy, han sido heridos por esa crisis, eso significa: un período de confrontación, de búsqueda constante, de soñar junt@s y clarificar opciones.

Están viviendo un momento de profunda riqueza porque eso significa estar más atent@s a la voz del Espíritu de Dios, que se manifiesta en la vida de mil formas, ustedes están en esa actitud de apertura, de acoger y buscar la gracia, como lo hizo Domingo cuando fue al sur de Francia y mantuvo una actitud de apertura, de “ojos abiertos” para descubrir lo nuevo y esa novedad transformó su vida en un Predicador incansable de la Palabra, esa Palabra que es vida y que nos hace pensar en realidades nuevas, distintas y dinámicas, que nos hacen soñar con un MJD renovado y fortalecido.

La FADO, reconoce que ustedes, jóvenes del MJD, son un componente importante en nuestro caminar como Iglesia, que visualiza nuevos horizontes y los animamos a continuar en esa búsqueda en la cual están inmersos.

La FADO siempre está, y les animamos con nuestra oración y con nuestro apoyo. Los esperamos a que también hagan efectivo este “re- comprometerse en los espacios de la familia”.

Nos despedimos con un sororal y fraternal saludo en Santo Domingo y Santa Catalina.

Herman@s de la Mesa Directiva.

Santiago, 22 de agosto de 2.007

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me parece una alentadora y esperanzadora carta...un abrazo..
gracias a la mesa diractiva de FADO.

Pepe Bustos